Este emblemático espacio en el distrito del Rímac fue creado por el Virrey Juan de Mendoza y Luna en 1611 y está inspirada en la Alameda de Hércules de Sevilla y bellamente adornada por finas esculturas de mármol.
A lo largo de su historia sufrió diferentes remodelaciones, siendo la más relevante la realizada en 1856, donde se incluyeron las estatuas de mármol representando los doce signos del zodiaco, bancas, jarrones decorativos y faroles.
Desde aquí tendrás una vista privilegiada del Convento e Iglesia de los Descalzos, el Cerro San Cristóbal y las iglesias de la Virgen del Patrocinio y Santa Liberata.